sábado, 21 de noviembre de 2009

CAFÉ FILOSÓFICO EN CABRA




Antonio Sánchez Millán
Departamento de Filosofía
IES Aguilar y Eslava

Muchos son los profesionales que hoy en día pretenden enseñarnos a vivir. Pero, para ello muchas vidas han tenido que volverse patológicas. Psicólogos, psiquiatras, pedagogos, trabajadores sociales…, expertos que secuestran de nuestras capacidades la posibilidad de valernos por nosotros mismos. Quizás, volviéndonos dependientes, ellos mismos obtienen así un espacio profesional en el que ganarse también la vida. La filosofía, sin embargo, desde su nacimiento ha querido incitarnos a pensar para que, por nosotros mismos, aprendamos a vivir un poco mejor. Así se ejercitaban maestros y discípulos con la finalidad de aprender a pensar, que es aprender a vivir, en las escuelas antiguas de filosofía a partir del siglo VI a. de C, tanto de oriente como de occidente. Del círculo socrático surgieron en occidente diferentes tradiciones de pensamiento arraigado en la vida, un modo filosófico de vivir que unía sin fisuras estudio y ejercicio, teoría y práctica, saber y búsqueda de la felicidad, enseñanza y curación. Porque lo mismo que hay que cuidar el cuerpo, cuidando de su funcionamiento, necesitamos también preocuparnos de nuestra “alma”, ocuparnos de ser mejores para nosotros y para los demás. Con Sócrates, podemos preguntarnos si merece la pena de verdad una vida inauténtica que no es consciente de sí misma: “una vida sin examen no merece la pena ser vivida”, dicen que decía.

Estoicos, epicúreos, escépticos, platónicos, aristotélicos, cínicos, escuelas que eran centros donde se realizaban ejercicios “espirituales” para aprender a vivir, que no podían concebir la filosofía sin su dimensión vital y terapéutica, durante la época griega y romana. ¿Qué ha pasado, entonces, con la filosofía? Hoy aparece muchas veces arrinconada, recluida en la academia (escolar o universitaria), una materia de la que hay que examinarse, y que, como mucho, sirve para “comerse el coco” o “rayarse” un poco, según dicen ahora nuestros jóvenes. Y mientras se iba haciendo cada vez más académica, por desgracia, también se iba alejando progresivamente de la sociedad y de la vida de los seres humanos. Fue durante el período medieval que la religión cristiana acogió como propia la función psicagógica y terapéutica que había tenido la filosofía, relegando a ésta a convertirse en pura argumentación abstracta, de la que servirse para la justificación racional del propio credo. Pues bien, cuando la religión perdió su lugar central en las sociedades modernas, ha proliferado todo un ejército de sanadores de todo tipo y pelaje, con y sin el marchamo de la ciencia, que vienen a rellenar el hueco social dejado por la salvación religiosa, pero que se nutre de todos nuestros humanos anhelos y desesperaciones.

Carl Jung, afamado e influyente psiquiatra, discípulo de Sigmund Freud, confesaba que una parte importante de sus pacientes, aproximadamente un tercio de ellos, no sufrían “debido a alguna neurosis clínicamente definible, sino a causa de la falta de sentido o de propósito en sus vidas”. Algo que está mucho más cerca de la filosofía perenne de todos los tiempos que de la psiquiatría. Esto fue lo que llevó Gerd Achenbach a abrir en Alemania, hacia 1981, la primera consulta de asesoramiento o consejo filosófico, que posteriormente ha popularizado en EEUU, y en el mundo entero, Lou Marinoff, desde que publicó su famoso libro Más Platón y menos Prozac. Precisamente, cada vez está cobrando mayor auge una corriente que intenta recuperar el lugar que la filosofía tuvo en otros tiempos, antes de que fueran usurpadas sus funciones ancestrales, la corriente llamada Práctica filosófica, de la que el Café filosófico constituye un de sus formatos, junto a los Talleres de filosofía, el Diálogo socrático, la Consulta filosófica o la Filosofía con o para niños.

En concreto, los Cafés filosóficos comenzaron en Francia, y desde ahí se han ido exportando a otras regiones del planeta. En 1992, Marc Sautet, profesor de Filosofía Política de la Universidad de París, comentó en un programa de radio que se reunía cada domingo por la mañana con unos amigos para filosofar en un café junto a la Bastilla. Cuál no sería su sorpresa, cuando al domingo siguiente había allí un nutrido grupo de personas dispuestas a secundar la experiencia. Dispuestas a participar en este tipo de discusiones informales, que se fue extendiendo cada vez más, lo que le llevó a organizar un poco más los encuentros proponiendo algunas reglas básicas de funcionamiento, de manera que no se volvieran excesivamente caóticos. En nuestro país han comenzado a funcionar ya algunos y, desde aquí, hemos querido contribuir un poco a esta intención de sacar a la filosofía de su encierro académico.

El Aula Juan Carandell y Pericay, del Museo Aguilar y Eslava de Cabra, algunos viernes por la tarde, ha sido nuestro lugar de reunión, un excelente lugar de discusión. Un espacio fuera de las aulas pero no totalmente desvinculado de ellas, al que se invitó preferentemente a los alumnos y alumnas de 2º de Bachillerato del curso 2008-2009 (al último Café de la temporada asistió alumnado del grupo 3º de ESO A, al que se unieron de un modo muy provechoso varios alumnos y alumnas del Ciclo de Atención Sociosanitaria). Esta salida fuera del contexto normal de las clases era esencial para dotar al encuentro de un ambiente especial, en el que el profesor se volvía un simple propiciador del mismo, y en el que todos se volvían personas iguales que se reunían para filosofar de lo que ese momento único e irrepetible les deparase. Unos encuentros que pretenden tener continuidad el curso próximo, abriéndolos a un colectivo más diverso y más extraescolar.

¿Para qué nos reunimos? Para investigar juntos dialogando; Para hacernos preguntas y buscar la verdad; Para escucharnos y enriquecernos con otras posibilidades; Para pensar y vivir sabiendo cómo vivimos; Para conocernos mejor a nosotros mismos; Para disfrutar del momento.

¿Para qué no nos reunimos? No para debatir posturas contrapuestas, ni ganar ninguna competición; No para decir cada uno lo que le venga en gana, sin tener en cuenta al otro; No para soltar una conferencia o un discurso; No para alardear de lo listo, lo original o lo estupendo que somos; No para imponer nuestras opiniones a otros; No para pasar un mal rato


¿Cómo nos organizamos?


● Cualquiera de las personas asistentes puede plantear un tema o un problema filosófico en forma de pregunta
● Entre todos se elige la cuestión que haya tenido mayor aceptación, y la persona que la había propuesto puede comenzar la reflexión conjunta
● Habrá un/a moderador/a, que será el/la encargado/a organizar el turno de palabra y de encauzar la discusión o de realizar o pedir alguna aclaración, si es necesario.
● La intervención de cada persona deberá ser lo más breve posible, para que todos los que lo deseen puedan participar
● Es muy importante no interrumpir y ser muy respetuoso con el turno de palabra y las opiniones de los demás
● No hay que alcanzar conclusiones, pero sí podemos evaluar al final el trabajo realizado durante el encuentro
● Y, por supuesto, tomaremos café u otra cosa



¿Por qué tememos a la muerte?

En nuestro primer café filosófico investigamos juntos sobre la MUERTE, y llegamos a unas conclusiones sorprendentes, de las que quedamos bastante satisfechos, aunque fuera provisionalmente. Más o menos, discurrimos de la siguiente manera.

Nos planteamos esta pregunta, que nos pareció una buena manera de abrir una brecha en el tremendo e inmenso problema de la muerte, de nuestra muerte: ¿Por qué tememos a la muerte? Se dijo, primero, que tememos al dolor que supone morir, a cómo morimos. Pero, como afirmara Epicuro, cuando la muerte no está no la sentimos, y cuando está, ya no sentimos, así que para qué... Así que fuimos más allá y pudimos localizar que lo que realmente tememos de la muerte es la pérdida que implica, perder a nuestros seres queridos, por ejemplo. Pero, todo ello lo perdemos al perder la VIDA. Y por ahí seguimos dialogando. ¡Un momento! La vida, si la podemos perder, es que acaso ¿nos pertenece? ¿Qué nos pertenece de ella? En este punto vacilamos al principio, pero, finalmente comprendimos que nuestro cuerpo, por ejemplo, realmente no nos pertenece, ya nos viene dado, pero sí nos pertenece lo que nosotros hacemos con él, lo que hacemos con nuestra vida. Por tanto, nos pertenece todo aquello que hemos ido construyendo nosotros mientras vivimos. Pero, ¿con qué finalidad? ¿Por qué lo construimos? ¿Por qué ponemos tanto empeño en ello? ¿Por qué nos preocupamos tanto? PORQUE MORIMOS. Entonces, en ese caso, ¡la muerte contribuye a la vida! La muerte, de algún modo, construye la vida. Es decir, que sin la muerte, nuestra vida no sería la misma, es decir, que nuestra muerte forma parte de nuestra vida. Luego... ¡sorpresa! ¿Para qué temer a la muerte? Vivamos intensamente nuestra vida-muerte. Valoramos muy positivamente la experiencia de nuestro primer café filosófico, y nos fuimos algunos, tan contentos, a tomar un café u otra cosa.

¿Por qué necesitamos a Dios?

En nuestra última reunión investigamos sobre la RELIGIÓN. Antes, leímos un cuento corto adaptado de Tim Bowley (Semillas al viento, Ed. Raíces), que enlazaba con nuestra discusión del Café anterior sobre la muerte. Realmente, con él pudimos “reírnos” un poco con la muerte.

Casi todos los participantes repitieron, con alguna baja y con alguna incorporación. Dudamos, al principio, sobre cuál sería esta vez la pregunta con la que podríamos abrir brecha en este tema tan amplio. Propusimos estas dos preguntas: ¿Por qué necesitamos a Dios? ¿Todas las religiones hablan, en el fondo, del mismo Dios? Pero nos dimos cuenta de que la segunda se aclararía un poco, si resolvíamos la primera, así que por ella comenzamos el diálogo. Lanzamos varias hipótesis de trabajo, de las que se llevó la palma ésa que dice que necesitamos a Dios para no sentirnos solos. Planteamos, a continuación, una pregunta crítica: sí, pero ¿podemos vivir sin Dios? La respuesta que dimos fue que necesitamos creer en algo para poder vivir, y que Dios sería una de esas cosas que nos permite vivir con sentido nuestra vida, como mi familia, u otras. Pero entonces, ¿podemos vivir sin Dios? Parecía que se deducía de nuestra discusión que sí, que podemos vivir sin Dios, conclusión que a algunos no satisfizo mucho (ya sabemos que tema pisa un terreno difícil y delicado, el de nuestras creencias más íntimas). Otros sí que lo afirmaban categóricamente, y que lo decisivo para vivir era creer en algo.

Como algunos estaban algo perplejos por las implicaciones subyacentes de lo tratado esa tarde, iniciamos un nuevo camino: investigar por qué necesitamos creer. La hipótesis más valorada fue que necesitamos explicarnos nuestro mundo. Pero si todos tenemos nuestro mundo propio, necesitamos nuestra propia creencia, y entonces, habría tantas creencias como personas y mundos personales. A partir de este panorama, ¿cómo podemos hacer compatible la multiplicidad de creencias y la pretensión de hablar de un único Dios? Porque quedaba claro en nuestra discusión que no podemos vivir sin creencias, pero ¿es imprescindible creer en Dios? ¿No sería la creencia en Dios una forma, entre otras, de dar sentido a nuestra vida? De nuevo, volvíamos al punto de partida anterior, lo cual nos dejó bastante pensativos, sin saber muy bien si habíamos llegado a algo o estábamos como al principio. La investigación quedaba abierta, pero gracias a una participante insatisfecha con el camino y la posada encontrada, podíamos seguir pensando la siguiente pregunta: ¿cómo sé yo en qué necesito creer? Buena cuestión, que necesitaría proseguir el diálogo, pero que quedó pospuesto, dada la hora y las ganas que ya teníamos de tomar nuestro merecido café de rigor.

Nuestro destino, ¿está ya escrito?

Estimados compañeros y compañeras de nuestro filocafé: este viernes, día 20 de marzo, tendremos la oportunidad de proseguir nuestra actividad, nuestro ejercicio filosófico. La hora, la misma, a las cinco de la tarde, hora taurina que nos permitirá lidiar con un nuevo toro que avive nuestro interés. Y ya lo aplazamos hasta después de Semana Santa.

El anterior encuentro giró en torno al tema del DESTINO (menudo toro sale del burladero). Los participantes eran todos noveles, y más numerosos que hasta entonces, de manera que se recuerda brevemente las reglas básicas de nuestro Café y da comienzo el mismo. Siguiendo con la costumbre de conectar con la anterior reunión, uno de los participantes cuenta una anécdota que bien podría servir esta vez de enlace; bien dicho, porque de boda, de religión y de curas iba la cosa. Esto era una vez que dos aspirantes a cambiar de estado civil querían librarse del cursillo prematrimonial, a lo que este cura accedió no sin comprometer a los contrayentes a una salerosa entrevista que haría las veces de preparación acelerada para la nueva vida en Cristo. Sin embargo, no duró mucho, para sorpresa y alivio de los participantes, pues ante la pregunta del sacerdote a uno de los contrayentes de “si creía”, y la respuesta incipiente de “yo creo en muchas cosas…, en las personas…, en…”, aquél debió pensar, como nosotros en nuestro último café, que lo imprescindible era creer; debió pensar con buen tino, que no habría nada peor que casar a dos descreídos.

Nuestro destino, ¿está ya escrito? Esta fue nuestra cuestión, nuestra punta de lanza para intentar horadar el destino. Veremos si está suficientemente afilada. Primero, debíamos definir qué íbamos a entender como el Destino. Algo (una fuerza, una ley, algo) insondable, inescrutable, desconocido: cualquier cambio que el ser humano quisiera introducir, estaría ya de antemano incluido en él, nada escaparía a su fuerza. He aquí su atracción y su abismo. Tanto como pasado u origen, así como también como meta o futuro, todo estaría condicionando, el destino estaría determinando nuestras vidas y la vida del Universo entero. Afloró por primera vez en boca de una participante la idea del destino como justificación de lo que pasa o me pasa. Había una vez un albañil que entre ladrillo y ladrillo, de continuo, ante algo que le pasara a alguien, soltaba su estribillo, tan manido como certero: “¡sería su sino!”. Una dicotomía emergía con fuerza en la reunión: el destino es, entonces, algo cósmico, o algo humano. Como fuerza cósmica, permite el orden del mundo, hace que todo esté trabado y bien trabado; si hay orden, hay destino, como aquello que hace posible la aparente coherencia del mundo. Pero, ¿por qué necesitamos pensar, como esta tarde, el destino? Para justificarnos. Pero, entonces, es algo humano. ¿Para qué lo queremos? Para ser más felices, para buscar un sentido y, de nuevo, para justificar. ¡Otra vez! Esta hipótesis iba ganando adeptos, pero afianzando cada vez más a unos cuantos férreos oponentes insatisfechos, pues parece que el destino nos trasciende de manera terrible. Y, ¿qué querríamos justificar? Nuestras acciones o lo que nos pasa. “Nuestras acciones”, nuestras, algo humano, “lo que nos pasa”, a nosotros, algo humano. Pero, si nos pasa, ¡no puede ser nuestro! Nuestra vida, ¿no es nuestra? Sí, no. Nuestras acciones, ¿son nuestras? Sí: actuamos nosotros; no: ya está prevista de antemano nuestra acción. Somos como marionetas. ¿Sí o no? Sí y no. A la desesperada, el moderador invoca a Kant: ¿Qué podemos hacer? ¿Qué nos cabe esperar? Vivir como si fuéramos libres, ya que nunca podremos llegar saber cuál era nuestro destino, que quizás todo tenga un sentido posteriormente, al final del camino (como diría Hegel). Vacas sagradas de la historia de la filosofía, que no impresionan a tan exigentes y libres participantes en la discusión, libres como están de exámenes y ataduras, pensando libremente y por sí mismos, filosofando, estos aprendices de filósofos, pues no saben, pero buscan juntos saber. No en vano, la manzana había estado madurando y, en un momento súbito como un destello del sol que nos ilumina después de habernos cegado, se hacía la luz, una luz que satisfizo mucho a los participantes. De pronto… ya no era necesario seguir, la embestida había sido resistida, el embate había sido ganado, al menos tentativamente: EL DESTINO ES TU VIDA. Una voz femenina realizó la invocación, los demás obedecíamos. Comprobemos, si era nuestro destino tomar juntos a continuación una taza de café u otra cosa.

Los que se aman, ¿son uno?

El Café filosófico anterior comenzó con la lectura de un texto de Nietzsche, de su Ecce Homo, que venía como anillo al dedo del destino (tema tratado aquel día) y al remanso de la posada en la que pudimos finalmente solazarnos un rato. Decía así:

“Mi fórmula para exponer la grandeza en el hombre es amor fati (amor al destino): el no-querer que nada sea distinto ni en el pasado ni en el futuro ni por toda la eternidad. No sólo soportar lo necesario, y aún menos disimularlo –todo idealismo es mendacidad frente a lo necesario- sino amarlo”.

EL AMOR. Y nuestra pregunta: los que se aman, ¿son uno? Sí, porque comparten sufrimiento y alegrías, estados de ánimo. Pero, ¿no han de tener alguna independencia mutua? La conversación basculaba entre estas dos posiciones. ¿Qué significa, entonces, ser uno en el amor? Compartir; una primera hipótesis que fue analizada. Vivir en el otro. Cuando se ama de verdad, es un placer complacer al otro, ceder al otro no supone una concesión ni una pérdida de uno mismo. Dos nuevos participantes en la reunión, que son pareja enamorada, ejercían de guías en nuestra búsqueda (qué magnífica ocasión para hablar del amor). Pero, si amar es vivir en el otro, ¿sólo vive uno, en el otro? ¿Es necesaria una simetría, una reciprocidad? El verdadero amor no busca recibir, no es una relación simétrica entre dos, es cosa de uno. Una posición fuerte que se atrincheró un buen rato. Pero, ese amor de uno, ¿es viable? ¿Es amor? Es amor, pero no es viable, se responde. En este punto, la conversación dio unos cuantos bandazos, pues parecía que dicha conclusión sería aceptable o no, en función del tipo de amor que se tomara en consideración. El amor de pareja, el amor filial… ¿Se puede medir cuál es mejor paradigma de amor, para que su estudio nos pueda hablar del verdadero amor? ¿Se pueden medir cosas diferentes? Se decide, entonces, definir con más profundidad qué entendemos como “reciprocidad” en el amor, de manera que todos nos sintiéramos más a gusto, sea el que fuere el modelo de amor del que hubiéramos partido. No es un mero intercambio a la manera económica (“tú me das, yo te doy”), no es ninguna falsa e interesada simetría, no es ninguna obligación mutua, que son formas de amor con trampa. Se trata de un dar mutuo generoso. Pero, ¿tienen que dar lo mismo? De ninguna manera. Vamos a la caza y captura de buenos conceptos, intentamos conceptualizar adecuadamente lo que entendemos nosotros, en este momento único, por AMOR. El modelo biológico de la simbiosis, se descarta. ¿Se trata de una complementariedad? ¿Dos conjuntos complementarios? Mejor… una intersección de conjuntos. Curioso que cuadre más para el caso, un concepto de origen matemático. ¿Tiene que ver la matemática con el amor? O, ¿es quizás un aspecto de la vida amorosa la que inspira el concepto operativo? No en vano el matemático es antes que matemático, amante, y antes de operar con abstracciones separadas de la vida (como diría Aristóteles), y mientras opera con ellas, vive también y de la vida extrae sus conceptos. Es una pregunta que este cronista se hace ante la sorpresa de que el amor sea una relación de intersección entre dos mundos que coinciden y se comparten, pero no completamente, pues, a la vez no dejan de, ni deben dejar de, tener su mundo propio, es decir, que no se anulan entrando en colisión, ni tampoco se aíslan y se endiosan, sino que se engrandecen mutuamente. Y para celebrar nuestra conclusión, nos fuimos a tomar café u otra cosa al sitio acostumbrado de la Plaza del Ayuntamiento.
Artículo publicado en "La Opinión digital" (http://www.laopiniondecabra.com/)

lunes, 16 de noviembre de 2009

ACTUACIONES DE LOS COMPONENTES DEL GRUPO DE TRABAJO


Las actuaciones de los distintos miembros del Grupo de Trabajo estarán encaminadas a la producción de materiales didácticos aplicables al aula en la materia “Filosofía y Ciudadanía” de Primero de Bachillerato en la línea de la Práctica Filosófica, así como el intercambio de experiencias y conocimiento en el marco de una investigación cooperativa. De una forma detallada, estas son las tareas encomendadas a los integrantes del Grupo:
Octubre 2009:
- Tomar parte en la planificación de los trabajos del Grupo (análisis de los objetivos, contenidos, metodología y dinámica de trabajo previstos en el Proyecto, análisis de las propuestas sobre textos y materiales de estudio, temporalización de acuerdo con la selección de textos y materiales efectuada, valoración de las posibilidades de difusión de los trabajos del Grupo en diferentes convocatorias y publicaciones, recopilación de materiales sobre Práctica Filosófica y Filosofía Antigua).
Noviembre 2009:
- Analizar y valorar críticamente, de manera individual, los siguientes materiales correspondientes a los contenidos de la Primera Parte del Proyecto (Introducción: Filosofía antigua y filosofía como modo de vida): “Ejercicios espirituales”, en Pierre Hadot, Ejercicios espirituales y filosofía antigua, Madrid, Siruela, 2006, pp. 23-58. y “Tecnologías del yo”, en Michel Foucault, Tecnologías del yo y otros textos afines, Barcelona, Paidós, 1996.
- Estudiar en equipo el contenido de los materiales analizados y valorados críticamente, y participar activamente en los debates que se pudieran suscitar al respecto.

Diciembre de 2009-Mayo de 2010:
- Analizar y valorar críticamente, de manera individual, los siguientes materiales correspondientes a los contenidos de la Segunda Parte del Proyecto (Elaboración de propuestas didácticas):

a) Sócrates
-Antonio Sánchez Millán: “Los otros: una aplicación didáctica del Eutifrón de Platón”.
-Texto complementario: “La figura de Sócrates”, en Pierre Hadot, Ejercicios espirituales y filosofía antigua, Madrid, Siruela, 2006, pp. 79-109.
b) Los cínicos
-Diógenes Laercio, Vidas y opiniones de filósofos ilustres, Libro VI, Madrid, Alianza Editorial, 2007.
-Textos complementarios: 1) “A la búsqueda de la insolencia perdida”; “El gabinete de los cínicos”, en Peter Sloterdijk, Crítica de la razón cínica, Madrid, Siruela, pp. 175-220; 247-66. 2) Carlos García Gual, La secta del perro, Madrid, Alianza editorial, 1987. 3) A. Sánchez Millán, “La sabiduría de los antiguos. Diógenes y otros cínicos”, Revista de Feria, 2009.
c) Los estoicos
-Epicteto, Disertaciones por Arriano/Manual, Madrid, Ed. Gredos.
-Texto complementario: “Marco Aurelio”, en Pierre Hadot, Ejercicios espirituales y filosofía antigua, Madrid, Siruela, 2006.
d) Los epicúreos
-Diógenes Laercio, Vidas y opiniones de filósofos ilustres, Libro X, Madrid, Alianza Editorial, 2007.
-Lucrecio, De rerum natura (selección de textos), Barcelona, Alma Mater,
-Texto complementario: Carlos García Gual, Epicuro, Madrid, Alianza Editorial, 1981.

e) Los escépticos
-Sexto Empírico (selección de textos):

- Estudiar en equipo el contenido de los materiales analizados y valorados críticamente, y participar activamente en los debates que se pudieran suscitar al respecto.
- Diseñar actividades de cada una de las escuelas o pensadores, aptas para su uso en clase con el alumnado de 1º de Bachillerato, e inspiradas en los ejercicios espirituales (o filosóficos) que podamos rastrear en sus textos.
- Revisar la metodología del grupo.

EL ARTE DE VIVIR: FILOSOFÍA ANTIGUA Y PRÁCTICA FILOSÓFICA. PROPUESTAS DIDÁCTICAS.



Hemos vuelto a constituir un Grupo de Trabajo que pretende continuar la labor desarrollada en el curso 2007-2008 por el Grupo de Trabajo “Práctica filosófica: nuevos cauces sociales y educativos para la filosofía”, y en el curso 2008-2009 por el grupo de Trabajo “Arte, Filosofía y Práctica Filosófica. Una aproximación teórica y propuestas didácticas” en el marco de las actividades del CEP de Málaga y de la Asociación Andaluza de Filosofía.
Pensamos que los dos objetivos básicos que nos planteamos inicialmente (obtener "información" sobre la importante corriente de Filosofía aplicada denominada "Práctica Filosófica" que comenzó a tener voz propia en los años ochenta y la "formación" de los miembros del Grupo en este enfoque filosófico) se han visto cumplidos con creces. Los trabajos del Grupo han tenido una clara proyección sobre nuestra labor cotidiana en el aula y se podría decir, en términos generales, que han cambiado por ello nuestra práctica docente. Pensamos que nuestro trabajo ha podido contribuir, por todo ello, a la innovación pedagógica, y ésta se puede cifrar en el uso y desarrollo de un enfoque dialógico y eminentemente participativo, capaz de servir de instrumento de dinamización en el marco de la institución escolar.
En el presente curso, 2009-2010 queremos elaborar propuestas didácticas en la línea de la llamada “Práctica filosófica” tomando como referencia las obras filosóficas de la Antigüedad y el concepto de “sabiduría”, reflexionando sobre su actualidad y vigencia en un contexto de crisis. Con este fin, diseñaremos actividades de conceptualización, problematización y argumentación ajustadas a la etapa del Bachillerato, y publicaremos el devenir de nuestra investigación en este BLOG.
Nos une el convencimiento de que la filosofía, como arte de vida, debe trascender sus prejuicios académicos y convertirse en un conocimiento indisociable de la experiencia cotidiana, siendo capaz de proporcionar herramientas y recursos útiles desde el punto de vista social en general, y desde la perspectiva educativa en particular. Sólo así se podrá conseguir que la filosofía tenga una mayor y mejor presencia social y proyección en el marco del proceso de enseñanza-aprendizaje.


Los miembros del Grupo, profesores de Filosofía, somos: Mª Ángeles Bermejo (Málaga), Juan Jesús Ojeda (Málaga), Antonio Sánchez (Córdoba) y Rafael Guardiola (Málaga), con la colaboración de Alfredo Martínez (Londres).

miércoles, 10 de junio de 2009

CRÓNICA DE LAS ÚLTIMAS SESIONES DEL GRUPO


El martes 12 de mayo de 2009 tuvo lugar la Novena Sesión del Grupo de Trabajo en el Centro de Profesorado de Málaga. Nos dedicamos, fundamentalmente, a reflexionar y cambiar impresiones sobre las actividades de aplicación didáctica diseñadas por Antonio Sánchez Millán sobre el Eutifrón de Platón con el sugerente título de “Los otros”. Tras una fecunda lluvia de ideas, acordamos proponer como actividad de motivación inicial el análisis y comentario de la película “La caja de música” de Constantin Costa-Gavras. El trabajo sobre la película “Los otros” de Alejandro Amenábar se propondrá como actividad de profundización. Se valoró, asimismo, la conveniencia de clasificar las actividades de acuerdo con su grado de dificultad y establecer como destinatarios preferentes de las mismas a los alumnos de la materia “Filosofía y Ciudadanía” de 1º de Bachillerato. En otro orden de cosas, quedamos en diseñar una actividad de motivación inicial consistente en la ejemplificación de la práctica del método Marinoff: ¿cuándo me he sentido tratado injustamente?, a partir de la selección de una experiencia individual. También estuvimos de acuerdo en ampliar el planteamiento inicial en el apartado 1. El caso Sócrates (Sócrates es acusado de no respetar a los dioses antiguos y de crear nuevos dioses) con los siguientes contenidos: la relación entre ética y derecho, el problema de la ocultación del delito (maltrato por razón de género, pedofilia en la Iglesia católica…) por parte de los familiares, la preocupación de los políticos por la juventud, el valor de la juventud para la dinámica social la búsqueda del bien común, el límite del respeto a las religiones, la envidia, la risa. Finalmente, acordamos efectuar, en la 10ª sesión, prevista para el martes 26 de mayo de 2009, el balance de los trabajos del Grupo durante el presente curso, y valorar las posibilidades de continuidad de los mismos en el curso 2009-2010.
Como estaba previsto, la última sesión del Grupo la dedicamos a la evaluación de nuestras tareas durante el presente curso. En lo que respecta a nuestra práctica docente cabe decir que los trabajos del Grupo en la línea de la “Práctica Filosófica” contemporánea han tenido una proyección directa sobre nuestra labor diaria en el aula, contribuyendo con ello favorablemente a la mejora de nuestro trabajo. Podemos destacar la toma de conciencia del profesor como “animador” de los debates suscitados en el aula, y el uso habitual de los miembros del grupo de algunas de las herramientas más destacadas del enfoque dialógico. La aproximación teórica a la problemática contemporánea de la estética y la filosofía del arte ha tenido una aplicabilidad menor, dado que dichos contenidos no tienen una presencia manifiesta en los currícula de Filosofía, si bien ha servido en todo momento como elemento motivador para el debate en el aula. Pensamos que se han alcanzado con creces los objetivos fundamentales que nos planteáramos inicialmente: Recopilar y estudiar, en equipo, materiales diversos sobre los aspectos centrales de la problemática contemporánea acerca de la filosofía del arte. Establecer un diálogo crítico y racional entre los miembros del Grupo sobre la pertinencia o no de la tesis sobre el fin del arte. Recopilar y estudiar, en equipo, materiales diversos sobre “Práctica Filosófica” y actualizar conocimientos teóricos y técnicas al respecto. Analizar y ofrecer propuestas didácticas sobre la temática relevante del la filosofía del arte, en la línea de la llamada “Práctica filosófica”.
Promover el análisis, el trabajo cooperativo y el intercambio de experiencias entre los miembros del Grupo de Trabajo. Desarrollar un enfoque dialógico y eminentemente participativo, capaz de servir de instrumento de dinamización en el marco de la institución escolar.
Como sucediera el curso anterior, los trabajos del Grupo se han visto reflejados en la dinámica de las clases de los miembros del mismo y, por ello, en la vida de nuestros Centros. En particular, hemos tenido la ocasión de brindar a parte del alumnado y el profesorado de los Institutos “Fernando de los Ríos” y “Santa Bárbara” la posibilidad de participar en una sesión de “Práctica Filosófica” animada por uno de los especialistas más destacados, Óscar Brenifier, y ello ha servido como elemento dinamizador y motivo de reflexión en el aula. De otro lado, es obvio que el enfoque del “diálogo filosófico en el aula” rompe con el desarrollo lineal del currículo y supone un enriquecimiento en nuestra labor docente, proporcionando nuevas vías para desarrollar los contenidos programados en las materias a cargo de los Departamentos de Filosofía, así como en las restantes materias que se imparten en los Centros educativos.
Y como nuestra dedicación al oficio filosófico es insaciable, hemos quedado para proseguir la elaboración de la propuesta sobre el Eutifrón el próximo martes, día 16 de junio y, tal vez, analizar los vídeos que grabara Óscar Brenifier en las sesiones con nuestro alumnado.


miércoles, 29 de abril de 2009

LO BELLO ES DIFÍCIL


En la octava sesión del Grupo de Trabajo nos hemos ocupado del diseño de actividades de aplicación didáctica en la línea de la Práctica Filosofica. En la antesala de la reunión, en la entrada del CEP de Málaga, Juan Ojeda y Rafael Guardiola han iniciado un diálogo apasionado que se ha continuado posteriormente con el resto de los integrantes del grupo en esa pequeña dependencia en la que solemos reunirnos, con olor a café y galletas y con el mecánico sonido de una impresora como única música de fondo. Hoy Juan viene pertrechado con el Crepúsculo de los ídolos de Nietzsche, dispuesto a recordarnos que no todo son bondades en el ejercicio del diálogo socrático. El dialéctico puede convertirse en un tirano empeñado en vencer con su implacable artificio:"el dialéctico deja a su adversario la tarea de probar que no es un idiota", dice Nietzsche, y Juan cree reconocer en estas palabras muchas de las quejas de los alumnos que se prestaron en marzo al diálogo socrático animado por Óscar Brenifier en su Centro. Rafael y Alfredo piensan, no obstante, que Nietzsche goza con la dialéctica, con el libre fluir del pensamiento, y que no habría puesto muchos peros a Brenifier, pese a la servidumbre de éste hacia la lógica clásica.

Acto seguido, Juan trae a nuestra consideración un artículo de Quino Petit, publicado el El País Semanal del 22 de febrero de 2009: "Estos cuadros los puede pintar una niña", sobre el éxito de los cuadros de la niña australiana Aelita Andre. Gracias a ello nos preguntamos si nos encontramos aquí realmente ante una manifestación artística o se trata, más bien, de una estrategia de marketing. La vieja cuestión de arte y buen arte que nos trae de cabeza desde el principio. Y como una cosa nos lleva a la otra, volvemos a reflexionar sobre la experiencia estética, sobre la belleza artística y la belleza natural, y Alfredo Martínez deja caer que la emoción que siente ante la segunda supera, con creces, actualmente, a la primera, a pesar de haber consagrado muchas horas a devanarse los sesos sobre la artisticidad y cosas parecidas. Y es que la experiencia estética, ese tema tan escabroso, implica habérselas con el conocimiento, el placer y el juicio del gusto.

Hemos valorado a continuación las posibilidades del Hipias Mayor de Platón a la hora de diseñar actividades de aplicación didáctica en el nivel de 1º de Bachillerato ("Filosofía y Ciudadanía"), de la mano de la metodología del diálogo socrático, y hemos llegado a la conclusión, tras las oportunas deliberaciones, de que aunque su estructura formal ejemplifica perfectamente la práctica del método socrático, su temática (la investigación sobre la naturaleza de lo bello en sí mismo) pudiera resultar poco atractiva para el trabajo en clase en dicho nivel. Por todo ello, nos decantamos por trabajar en las próximas sesiones sobre algún texto cuya temática entronque con la ética o la política. Por todo ello, acordamos realizar una lectura crítica del diálogo de Platón Eutifrón y diseñar actividades de aplicación didáctica en la línea de la Práctica Filosófica contemporánea a propósito de dicho texto, sobre la base de un trabajo inicial de Antonio Sánchez titulado Los otros. Para terminar, Alfredo Martínez tiene la sospecha de que Ortega hace trampas y que su Raciovitalismo es un relativismo encubierto (su filosofía recae en el relativismo en su intento de huir del escepticismo). Juan y Rafael sospechan, por su parte, que la filosofía de Ortega no está tan lejos de la Razón Dialéctica. El tiempo ya no nos da para más.

martes, 31 de marzo de 2009

EL ARTE DE PREGUNTAR, EL ARTE DE RESPONDER


El filósofo francés Óscar Brenifier ha visitado la ciudad de Málaga, respondiendo a la invitación del Grupo de Trabajo “Arte, Filosofía y Práctica Filosófica”, a la sazón, miembros de la Asociación Andaluza de Filosofía, y a una petición de asesoramiento externo formulada al Centro de Profesorado de Málaga, y no ha dejado a nadie indiferente. Óscar Brenifier es doctor en Filosofía, Director del Instituto de Prácticas Filosóficas, Director de la Revista “Diotime-L’Àgora” sobre Didáctica de la Filosofía, y orientador filosófico. Es uno de los más importantes representantes a nivel mundial del movimiento de Filosofía Práctica y Cafés Sócrates o Cafés Filosóficos, y ha impartido numeroso talleres filosóficos con adultos y niños en muchos países. Es autor de un buen número de publicaciones de iniciación a la Filosofía y de Didáctica de la Filosofía, y coautor del Informe de la UNESCO sobre el estado de la Filosofía en el mundo: “La philosophie, une école de liberté”.
Tres fueron los talleres en los que Óscar Brenifier ejerció de animador del diálogo filosófico: el martes 17 de marzo, en un aula del Centro de Profesorado de Málaga, con un grupo de profesores y profesoras procedentes de las provincias de Córdoba y Málaga, y el miércoles 18 de marzo, de las 9,15 a las 11,15 horas, con un nutrido grupo de adolescentes de 1º de 2º de Bachillerato del I.E.S. “Santa Bárbara” de Málaga, y acto seguido, de las 12 a las 14 horas, con un grupo más reducido de adolescentes de 1º de Bachillerato del I.E.S “Fernando de los Ríos” de la misma ciudad.
En plena degustación de una paella, a orillas del mar, Óscar Brenifier afirma que, al organizar y lanzar el diálogo, actúa como Obelix cuando se encuentra con los romanos: primero golpea y luego pregunta. No todo el mundo admite y se siente capaz, según el caso, de digerir su estilo agresivo, el celo con el que saborea la práctica de la ironía socrática, ni la fidelidad al maestro, al plantear una discusión dialéctica de corte aporético, muy alejada de las exigencias académicas al uso. Como afirma en su libro El diálogo en clase, la actividad filosófica es una actividad singular que se configura a sí misma en su ejercicio, y está determinada por tres operaciones: la identificación (pensar al otro a partir de uno mismo); la crítica (pensarse a uno mismo a partir del otro); y conceptualización (pensar en la simultaneidad de uno mismo y del otro). Es esta última fase un proceso por medio del cual el sujeto descubre los conceptos que están en la base de sus preguntas, de los problemas que se plantea, para proceder a continuación a su análisis, discriminando gracias a ello sus antinomias y las consecuencias que se derivan de ello. Se trata, en definitiva, de desarrollar las competencias cognitivas de profundizar, problematizar y conceptualizar, y todo ello haciendo uso del viejo método de preguntas y respuestas, tras una exposición de las reglas del juego. No es de extrañar que la clave de su propuesta radique en el arte de preguntar y el arte de responder formulando hipótesis, en el arte de la dialéctica que es tanto saber hablar como saber escuchar, provocando la perplejidad en el interlocutor y, quién sabe, "ayudando a la mosca a salir del mosquitero", parafraseando a Wittgenstein.
Los adolescentes a los que Brenifier ha seducido con el vertiginoso ritmo que impone a sus preguntas y aseveraciones han vencido la incomodidad inicial al sentirse interpelados y reclamar de ellos una atención sin tregua, y han valorado favorablemente la experiencia. Y es que, salvo un puñado de voces que consideraran el taller una pérdida de tiempo, un impedimento en el desarrollo de la Programación (porque, además, no se llegaba a ningún resultado manifiesto), la mayor parte de nuestros alumnos y alumnas hablan del taller vivido como una actividad original, interesante, amena y divertida, que facilita el conocimiento de los demás y el autoconocimiento, gracias a la participación de todos.
Para terminar, dejamos abiertas dos preguntas que le planteamos al propio Brenifier: ¿es el diálogo de Sócrates, una dinámica a todas luces dirigida, un auténtico diálogo? ¿es esencial para la práctica del método socrático que sea capaz de movilizar nuestras emociones?

miércoles, 11 de marzo de 2009

6ª SESiÓN DEL GRUPO DE TRABAJO
















En la 6ª Reunión del Grupo de Trabajo “Arte, Filosofía y Práctica Filosófica”celebrada el martes 10 de marzo de 2009 nos hemos ocupado de la Organización de una sesión de asesoramiento externo para el próximo martes día 17 de marzo y de las aplicaciones didácticas.
Hemos abordado la modificación del calendario de reuniones del Grupo de Trabajo, el coordinador ha proporcionado información sobre la actualización del BLOG del Grupo de Trabajo y hemos hecho acopio de materiales. El centro de la sesión ha consistido en la organización y el funcionamiento de las próximas sesiones de Asesoramiento externo sobre Práctica Filosófica. Tras las oportunas reflexiones, hemos acordado realizar la 7º sesión del Grupo de Trabajo el próximo martes, día 17 de marzo de 2009, y la 8º sesión el día 21 de abril de 2009. También hemos decidido celebrar la 7ª sesión en el CEP de Málaga, con el asesoramiento externo del filósofo francés Óscar Brenifier (El Arte de Preguntar. El café filosófico), y llevar a cabo un “Taller de Práctica Filosófica” con alumnado el miércoles día 18 de marzo de 2009: de las 9,15 a las 11,15 horas en el IES “Santa Bárbara” de Málaga, y de las 12 a las 14 horas en el IES “Fernando de los Ríos” de Málaga. En la 8ª sesión del Grupo de Trabajo tenemos previsto realizar una lectura crítica del diálogo de Platón Hipias Mayor y diseñar actividades de aplicación didáctica en la línea de la Práctica Filosófica contemporánea a propósito de dicho texto. Juan Jesús Ojeda presenta una serie de materiales para ser analizados en ulteriores sesiones: una colección de artículos de prensa del filósofo Félix de Azúa, la introducción del libro de Terry Eagleton, El arte como ideología, Granada, Trotta, 2006, y el libro de M. Hauskeller, ¿Qué es el arte? Posiciones de la estética desde Platón a Danto, Valencia, Diálogo, 2008. Y acordamos, finalmente, examinar el debate sobre los enfoques de la Teoría Institucional del Arte y las Teorías sobre la Intencionalidad Artística sobre la base del artículo de Francisca Pérez Carreño, “«Institución arte» e intencionalidad artística” al que habíamos hecho referencia en sesiones anteriores. La presente sesión ha sido muy animada, casi nos tienen que echar de las instalaciones del CEP de Málaga y hemos acabado hablando de la sinceridad de la propuesta metafísica de Schopenhauer en plena calle, lo que no deja de ser altamente sospechoso.




martes, 17 de febrero de 2009

QUINTA SESIÓN: DIFUSIÓN DE LOS TRABAJOS DEL GRUPO Y POSIBLES APLICACIONES DIDÁCTICAS



La 5ª Reunión del Grupo de Trabajo “Arte, Filosofía y Práctica Filosófica” celebrada en el CEP de Málaga el martes 10 de febrero de 2009 se centró en la difusión de los trabajos del Grupo y las posibles aplicaciones didácticas. La vocalía de Málaga de la AAFi informó sobre la última reunión de la Directiva y los nuevos Foros de la web de la Asociación. Nos entrevistamos con el Asesor del CEP de Málaga, Esteban Llorens, hablamos de la labor del Grupo hasta el momento presente y sus proyectos futuros. Aprovechamos la ocasión para concretar nuestra solicitud al CEP de asesoramiento externo sobre Práctica Filosófica (calendario y selección de ponentes). En otro orden de cosas nos dedicamos al análisis y valoración de recursos didácticos sobre Filosofía y Arte en la red y de sus diferentes formatos, en especial, los creados por Alfredo Martínez Sánchez. Acordamos actualizar el BLOG del Grupo de Trabajo, efectuando un breve recorrido por los temas tratados y las líneas futuras de discusión; participar activamente en los Foros de la AAFi (especialmente, en los relativos a la organización del Congreso de 2010 y en las propuestas sobre la Prueba de Acceso a la Universidad); realizar una lectura crítica del diálogo de Platón Hipias Mayor con el fin de diseñar actividades de aplicación didáctica en la línea de la Práctica Filosófica contemporánea; y recopilar materiales de apoyo para el estudio del Hipias Mayor de Platón y sobre la metodología de la Práctica Filosófica. En esta sesión el Coordinador del Grupo hizo entrega a los presentes de una copia de tres textos relativos a Platón, Aristóteles y la mimesis (Valverde, J.M.: Breve historia y antología de la estética, Barcelona, Ariel, 1998, pp. 11-43; Bozal, V.: Historia de las ideas estéticas, vol. I, Madrid, Historia 16, 1997, pp. 107-116; y Bozal, V.: Mimesis: las imágenes y las cosas, Madrid, Visor, 1987, pp. 65-95), y acordamos abordar en próximas sesiones el uso del arte como recurso didáctico.

CUARTA SESIÓN: "MIQUEL BARCELÓ: OBRA AFRICANA" EN EL C.A.C DE MÁLAGA



En la 4ª Reunión del Grupo de Trabajo “Arte, Filosofía y Práctica Filosófica”, celebrada el martes 27 de enero de 2009, nos encontramos en el Centro de Arte Contemporáneo de Málaga y disfrutamos de la exposición “Miquel Barceló: obra africana”. Posteriormente, en la cafetería, tuvimos un animado debate sobre la función del museo, la naturaleza del juicio estético y la relación entre arte y mercado. Aprovechamos la ocasión para fijar nuestras propuestas para la reunión de la Junta Directiva de la Asociación Andaluza de Filosofía prevista para el 31 de enero de 2009, entre las que se encontraban sugerir a la AAFi como tema para el Congreso de 2010: Arte y Filosofía.

TERCERA SESIÓN: LA EXPERIENCIA ESTÉTICA Y SU RELACIÓN CON EL ARTE. LA HIPÓTESIS DE DANTO SOBRE EL FIN DEL ARTE



La 3ª Reunión del Grupo de Trabajo “Arte, Filosofía y Práctica Filosófica” celebrada en el CEP de Málaga, el martes 13 de enero de 2009, tuvo como eje central el tema de la experiencia estética y su relación con el arte, así como el análisis de la hipótesis de Danto sobre “el fin del arte.” Para ello analizamos y valoramos críticamente el artículo de José Jiménez titulado “El mundo simbólico y la creatividad espontánea”, Mathesis, nº4, Madrid, Universidad Autónoma de Madrid, 1980, pp. 5-11, realizamos un concienzudo análisis y valoración crítica del artículo sobre la problemática contemporánea del “Fin del arte” de Arthur Danto, titulado “El Final del Arte” (El Paseante, 1995), así como de las “Conclusiones” de la tesis doctoral de Mª José Alcaraz León, “La teoría del arte de Arthur Danto: de los objetos indiscernibles a los significados encarnados” (07/06/2006). Acordamos celebrar la 4ª Sesión en el Centro de Arte Contemporáneo de Málaga, con el fin de reflexionar sobre la exposición “Miquel Barceló: obra africana. Acordamos, igualmente, examinar y valorar en sesiones posteriores los materiales que se citan a continuación:
· El artículo de Francisca Pérez Carreño, “«Institución arte» e intencionalidad artística”
· La reseña de Rafael Guardiola Iranzo, “La mirada glorificada”, La balsa de la Medusa, 32, Madrid, 1994, a propósito del libro de Richard Wollheim, La pintura como un arte, Madrid, Visor.
· El artículo de Alfredo Martínez Sánchez, titulado: “Estética Transcultural y Transculturalidad Estética”, publicado en el año 2006 en Espéculo. Revista de estudios literarios, Universidad Complutense de Madrid.

lunes, 16 de febrero de 2009

SEGUNDA SESIÓN: UNA APROXIMACIÓN TEÓRICA A LA PROBLEMÁTICA CONTEMPORÁNEA DE LA FILOSOFÍA DEL ARTE



En la 2ª Reunión del Grupo de Trabajo “Arte, Filosofía y Práctica Filosófica”, celebrada en el CEP de Málaga el martes 2 de diciembre de 2008, intentamos una aproximación teórica a la problemática contemporánea de la Filosofía del Arte. Con este fin realizamos un análisis y valoración crítica de los siguientes materiales: “Capítulo 2: El arte. El descodificador, La Gioconda y el urinario”, del libro de Michel Onfray.: Antimanual de Filosofía, Madrid, Edaf Ensayo, 2005, pp. 65-96. El artículo sobre la problemática contemporánea del “Fin del arte” de Arthur Danto, titulado “El Final del Arte” (El Paseante, 1995). El artículo de Valeriano Bozal titulado “Arte (Filosofía del)”, correspondiente al Diccionario de Filosofía Contemporánea, Salamanca, Ediciones Sígueme, 1976, pp. 34-46, dirigido por Miguel Ángel Quintanilla. Acordamos, siguiendo una sugerencia de Alfredo Martínez, efectuar una lectura crítica de los Capítulos IV y V del libro de José Jiménez, Teoría del Arte, Madrid, 2006, titulados “Componentes” y “La impronta estética del mundo moderno”, respectivamente. Con ello abordaríamos los conceptos de obra, artista, crítica de arte y público, así como de la cuestión de la diversidad y universalidad estética y cultural y de la problemática universalidad del fenómeno artístico. También nos pareció conveniente profundizar en las siguientes sesiones sobre la temática abordada en la sesión de hoy: la necesidad de disponer de un descodificador para entender la obra de arte (en particular, la necesidad de la teoría para la comprensión del fenómeno artístico); la relatividad del gusto, el papel del museo y el arte kitsch; la transformación de los objetos banales en objetos artísticos; la revolución de los soportes a raíz de las propuestas de Duchamp o Warhol; la singularidad de las artes y la especificidad del fenómeno musical; la participación activa del observador en el arte contemporáneo (la transformación del observador en artista); teorías de la representación y teorías de la expresión; la teoría institucional del arte y la intencionalidad artística. Desde este momento valoramos la conveniencia de diseñar actividades de aplicación didáctica sobre el diálogo de Platón Hipias Mayor, en la línea de la Práctica Filosófica contemporánea y la propuesta de Antonio Sánchez sobre el Eutifrón. Se sugirió tener en cuenta asimismo la propuesta del filósofo francés Oscar Brenifier recogida en su libro El Arte y lo Bello, Madrid, Ediciones del Laberinto, Colección "Aprendiendo a filosofar".

domingo, 15 de febrero de 2009

CRÓNICA DE NUESTROS PRIMEROS PASOS


En la 1ª Reunión del Grupo de Trabajo “Arte, Filosofía y Práctica Filosófica” celebrada en el CEP de Málaga el martes 3 de noviembre de 2008, nos ocupamos de la organización general del Grupo de Trabajo durante el curso 2008-2009. Tuvo lugar la presentación de los miembros del mismo, se fijó el calendario de reuniones, se efectuó un minucioso análisis de los objetivos, los contenidos, la metodología y la dinámica de trabajo previstos en el Proyecto, se establecieron los criterios para valorar los resultados obtenidos a lo largo del curso, y se habló del funcionamiento de este Blog. Acordamos realizar una primera selección de temas y materiales (libros, artículos o capítulos de libros, en su caso), que sería motivo de análisis en diferentes sesiones. En esta primera sesión se propusieron, entre otros temas: ¿cuándo algo se convierte en arte? (la especificidad del objeto artístico); el uso de las manifestaciones artísticas como recurso didáctico; universalidad artística y universalidad estética; la estética como ideología; arte y cultura de masas; el problema del realismo;y la universalidad del juicio moral. Decidimos, igualmente, examinar y valorar en la siguiente sesión algunos de los materiales propuestos por Rafael Guardiola:
El artículo de Valeriano Bozal titulado “Arte (Filosofía del)”, correspondiente al Diccionario de Filosofía Contemporánea, Salamanca, Ediciones Sígueme, 1976, pp. 34-46, dirigido por Miguel Ángel Quintanilla.
El “Capítulo 2: El arte. El descodificador, La Gioconda y el urinario”, del libro de Michel Onfray.: Antimanual de Filosofía, Madrid, Edaf Ensayo, 2005, pp. 65-96.
El artículo sobre la problemática contemporánea del “Fin del arte” de Arthur Danto, titulado “El Final del Arte” (El Paseante, 1995).
Un esquema sobre la “experiencia estética” relativo al capítulo I del libro de Valeriano Bozal.: Historia de las ideas estéticas (2 vols.), Madrid, Historia 16, 1997.
El capítulo “Sobre gustos hay mucho escrito”, cuya autoría corresponde a Amparo Zacarés Pamblanco, del libro Lecturas para estrenarse en Filosofía, Valencia, Editorial Diálogo, Colección Tábano, 2003.
También nos propusimos examinar y valorar en la siguiente sesión el artículo del miembro del Grupo, Alfredo Martínez, titulado: “Estética Transcultural y Transculturalidad Estética”, publicado en el año 2006 en Espéculo. Revista de estudios literarios, Universidad Complutense de Madrid. En otro orden de cosas, Antonio Sánchez solicitó colaboración de los miembros del Grupo para diseñar actividades didácticas sobre el diálogo de Platón Eutifrón, en la línea de la Práctica Filosófica contemporánea.